El presidente de la FRAVM, Prisciliano Castro, se reunió hoy con representantes de las ejecutivas regionales de CCOO y UGT, en un encuentro en el que fueron analizadas las consecuencias del "decretazo" en la Comunidad de Madrid.

Los asistentes a la runión coincidieron en que la región madrileña tiene un alto nivel de desigualdad social y económica, que se agrava en zonas como el sureste de la capital, a las que la entrada en vigor del decreto perjudicará aún más.

Asimismo, mantuvieron puntos de vista similares en cuanto a que las disminución de las prestaciones sociales por desempleo se traducirán en un aumento de la marginación, la delincuencia y la desvertebración social.

Por su parte, María Rodríguez, presidenta de ACUREMA-CECU, que tambin se reunió con ambos sindicatos, puso de relieve que su organización rechaza de manera contundente el "decretazo", por los efectos negativos que tendrá sobre el conjunto de la población madrileña.

A su juicio, "nos encontramos ante una agresión que no tendrá sus límites en las reducciones a las prestaciones por desempleo, sino que otros temas como la tramitación de la Ley de Huelga, sin tomar en cuenta los intereses más elementales de todos los sectores sociales que se verán afectados por la misma, pede suponer un recorte fundamental a las libertades ciudadanas", indicó.