"O el portavoz delPP, que ha dicho que hay 600 amigos de los socialistas que han sido beneficiados dándoles un trato fiscal favorable conoce la lista y, en ese caso, ha cometido un delito por acceder a información reservada, o no lo sabe y ha hecho una acusación sin fundamento y tiene que retirarla", dijo.

A su juicio, "un presidente del Gobierno no puede decir que el anterior Ejecutivo benefició a 600 amigos suyos concediéndoles un trato fiscal favorable y actuando en contra de los intereses públicos, porque son argumntos de una frivolidad, una irresponsabilidad y una demagogia tan extraordinarias que en sede parlamentaria tendrán que rectificar".

Insistió también en la profesionalidad de los funcionarios de la Agencia Tributaria, que, a su juicio, nunca hubieran cedido a una indicación política que implicara que se beneficiara en contra de la ley a amigos del Gobierno socialista. "Afortunadamente es imposible que eso pueda ocurrir", concluyó Borrell.

Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista, Joaquín Alunia, recordó que la sentencia del Tribunal Supremo conocida ayer "no sienta jurisprudencia, no hace prescribir las deudas de las que se habla y no le permite a Hacienda rendirse ante esa batalla".

Almunia advirtió que las acusaciones vertidas contra los socialistas son "extremadamente graves" y advirtió que "tendrá consecuencias políticas el que se mienta con esa desfachatez", por lo que el Grupo Socialista pretende que se "repongan la verdad en el Congreso".