"Yo considero que eso de gilipollas no es un insulto importante. Reconozco", dijo Frutos a Onda Cero, "que es una salida de tono, pero nada más. No es un insulto de intentar herir a una persona. Yo simplemente contestaba a exabruptos proferidos por el señor Yáñez".

Por su parte, Plar Rahola, portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya, dijo en torno a los incidentes producidos en la Cámara Baja el pasado miércoles, durante la comparecencia de Felipe González: "Yo no me siento políticamente crispada. Entiendo que algún compañero mío de hemiciclo y de otro partido estaba crispado y por eso dijo lo que dijo, "además, insultándonos en nuestra condición de mujeres (se escuchó un 'callaté zorra' desde los bancos socialistas dirigido a Rosa Aguilar de IU) que fue lo más desagradable". "En los pasillos", añadió Rahola a Onda Cero, "oí como un diputado socialista nos decía 'estas dos que se vayan a fregar'. Esto me parece fruto del estómago y no de la razón".

Finalmente, Fernando Fernández de Trocóniz, parlamentario del Partido Popular señaló que "lo ocurrido en el Congreso es lógico que sea sorprendente, pero la crispación política dentro del hemiciclo, dentro del Parlamento es lógica porque las cuestiones que se debaten son graves, son muy serias. El imputar a un presidente del obierno que puede ser un corrupto es muy serio y muy grave y produce crispación. Pero ante la crispación hay que dar sosiego y el sosiego a quien compete darlo es al Gobierno".