El Tribunal estima que el país vecino ha infringido la legislación comunitaria al no haber notificado al Ejecutivo europeo las meidas nacionales adoptadas. Francia no declaró como zona de protección especial ningún territorio del paraje de Basses Corbieres.

La directiva comunitaria sobre conservación de las aves silvestres insta a los Estados de la UE a prohibir la caza de algunas especies durante la época de nidificación y durante los periodos de reproducción y cría. Según la ley, las autoridades nacionales deben informar a Bruselas acerca de la aplicación práctica de sus legislaciones sobre caza de aves silvestres.

En 197, la Comisión mandó a París un escrito de requerimiento por incumplir esta directiva, ya que no se habían tomado medidas para adaptar el derecho galo al principio de "protección completa" de las aves silvestres. Asimismo, la Comisión consideraba que las leyes francesas fijaban unas fechas de apertura de la caza demasiado tempranas y unas fechas de cierre demasiado tardías.