Sin embargo, esta asignatura ha nacido marcada por la polémica, dado que los docentes han tachado de "disparatados" los temarios y han alertado de las dificultades de facilitar este tipo de enseñanza, según informa la Caja de Ahorros francesa (Caisse des Dépot) dentro de sus actividades sociales.

El Gobierno francés defiende que "que la educación sobre el medio ambiente para un desarrollo sostenible debe ser un componente importante en la formación inicial de los alumnos, desde su edad más temprana y a lo largo de su escolaridad, para permitirles adquirir los conocimientos y métodos necesarios que le sitúen en su entorno y actuar de manera responsable".

El principal fin que persigue Educación, es la toma de conciencia por parte de los niños sobre las cuestiones medioambientales, económicas y socioculturales, y mejorar su percepción sobre la interdependencia de las sociedades con el conjunto del sistema planetario.

A pesar de las buenas intenciones del Gobierno, el sindicato de profesores de segundo grado SNES, ha reconocido tener dificultades para ejecutar la enseñanza en esta materia.

Respecto al material de enseñanza, se trabaja ya en un cuaderno especial para el próximo curso, que se inicia en septiembre de 2005, que será el primer material pedagógico de este tipo.