El buque, bajo control operativo nacional del Mando de Operaciones, ha efectuado su segunda misión de escolta a un barco del Programa Mundial de Alimentos en su cuarta participación ya en la operación Atalanta.

Durante el operativo, la fragata realizó también operaciones de vuelo con el helicóptero AB-212 de la Tercera Escuadrilla , que lleva a bordo en esta misión, para una identificación visual temprana y el establecimiento de comunicaciones con el buque African Falcon.

Al finalizar la escolta, el mercante continuó su derrota hacia el Mar Rojo, mientras que la fragata española arrumbó al sur para continuar su patrulla por el Golfo de Adén. Uno de los principales objetivos de la fragata Numancia en su despliegue en la operación Atalanta es precisamente velar por la seguridad de buques vulnerables del Programa Mundial de Alimentos en su tránsito por estas aguas.

En este despliegue, además de un helicóptero, la fragata cuenta con drones Scan Eagle de la Undécima Escuadrilla. Embarca también un equipo de Infantería de Marina que asume labores de seguridad y abordaje; y un equipo médico, con capacidad de realizar intervenciones quirúrgicas a bordo. Además, lleva a bordo una oficial de la Marina de Guerra del Perú .

La Numancia , con una dotación de doscientos veinte efectivos, al mando del capitán de fragata Santiago Martínez Mata. A partir de agosto, la tercera fragata de la clase Santa María ejercerá como buque de mando de la Atalanta, embarcando a un estado mayor internacional al mando de un almirante portugués.