Salvando competencias básicas sobre Seguridad, Defensa, Política Exterior o grandesdecisiones económicas, "todas las demás deben ser el año 2000 administración regional y local.

En su opinión, una función tiene que corresponder a un funcionario y "ni una sola oficina o funcionario deben estar duplicaados, bajo ningún concepto, si queremos evitar la dilapidación, la ineficacia, y la decadencia", precisó.

Fraga añadió que la resdistribución competencial, imprescindible "para evitar que, a la larga, se reproduzca esa guerra civil de 100 años que nos asoló entre 1833-1939, y que tuo su raíz última en la nunca aceptada centralización de España, impuesto por los afrancesados y rechazada por la mayor parte de nuestro pueblo".

En una intervención de poco más de una hora para explicar una propuesta en trece tomos, de casi de 10 kilos de peso, el presidente gallego argumentó que en la reciente historia democrática española se impulsó con vigor la descentralizacióin política y ha quedado olvidada la descentralización administrativa, lo que a su juicio, puede causar que no se cumplan ls principios de equidad y solidaridad entre las diferentes autonomías.

"Cuando hay fallos en uno o en otro aspecto, cuando un pueblo se siente maltratado en el reparto de recursos comunes o incapaz de manifestar según sus peculiaridades religiosas, culturales o linguísticas, vienen los problemas, los enfrentamientos y los deseos de secesión", manifestó Manuel Fraga.

El presidente de la Xunta añadió que "sería suicida negarse a aceptar la necesidad de un ajuste dinámico y permanente entre las difeentes administraciones que concurren en el estado de las Autonomías."

Manuel Fraga comparó la Constitución a "un velero que tiene que estar en constante limpieza de fondos y corrección de rumbos". Asimismo, dijo que los nacionalismos suicidas del Este de Europa han venido a recordarnos "los riesgos, las rigideces contrarias a la realidad y al buen sentido".

Fraga Iribarne reivindicó que " la autonomía debe permitir que la identificación de cada comunidad, su autogobierno con medios administrativo y económicos suficientes, su participación previa y efectiva en la formación de la voluntad general del Estado, que a su juicio incluye, en la actualidad, alguna forma de participación en la política comunitaria - que ha dejado de ser política exterior- y la solidaridad a través de una efectiva política de compensación territorial".

El presidente de la Xunta defendió su propuesta como instrumento necesario para dar un nuevo impulso a la creación del Estado de las Autonomías, que había llegado a un puto muerto por la lentitud y mezquindad del proceso de transferencias y por los criterios restrictivos barajados por el Ministerio de Administraciones Públicas y por los responsables de la administración autonómica.

"Hay que seguir avanzando por el camino de las autonomias, la paarticipàción y la solidaridad para evitar que algunos intenten las vias falsas del separatismo, del supuesto hecho diferencial, la insolidaridad, y la autodeterminación", según Fraga.

Manuel Fraga admitió que la descentreaización tiene que realizarse también desde las Autonomías hacia municipios y diputaciones, pero dejando ver que este paso es menos urgente dado que el centralismo estatal es de hace siglos, y el autonómico de existir, dura poco más de una década.

Reiteró Fraga la necesidad de reformar el Senado para dar paarticipación a las Autonmías, pidió la participación de una conferencia de presidentes que sirva de respaldo a conferencias sectoriales que ahora suelen realizarse y trató de apoyar siempre sus reividicaciones en la propia Constitución, o en sentencias del Tribunal Constitucional, que hacen viable su propuesta.

El presidente de la Xunta, dijo que la prpuesta de Administración única, es extensible a todas las autonomías, pero argumentó que el Pacto Autonómico de febrero atribuyó nuevas e importantes competencias a diez comunidades de la "vía lenta", por lo que a su entender el nuevo avence debería comenzar por las históricas (Cataluña, País Vasco y Galicia), y seguir con las que, según dijo, han qemado etapas, caso de Navarra, Andalucía, Canarias o Valencia.

Fraga aceptó también como previsible que la homogeneidad total no se producirá nunca.

Por una parte, el presidente de la Xunta defiende la reforma de la Administración para dotar a las comunidades de medios paara cumplir su verdadera creación del estado.

A su jucio, urge la reforma del Estado de las Autonmías ante "la idea de que a muy corto plazo se impone la concesión del Estado Autonómico en otro decididamente federal de acuero con Maastricht"

Sin embargo, Manuel Fraga dedicó más de la mitad de su intervención a debaatir las críticas que desde diferentes grupos políticos y, sobre todo, desde el Gobierno Central, se han elevado ante su propuesta, lo que aprovechó, hoy, el portavoz del PSOE gallego, Antolín SDánchez Presedo, para decir que la intervención del presidente de la Xunta fue defensiva "un pliego de descargo sin ideas claras".

Por su parte, el portavoz del Bloque Nacionalista Gallego, Xosé Manuel Beiras, dijo ue "es una huía hacia adelante que nada tiene que ver con los problemas reales y actuales de Galicia".