Previamente, Fraga presidió el consejo ordinario de la Xunta que por primera vez se celebra en el transcurso de un retiro monacal, ya que en las seis reuniones anuales anteriores, la actividad del gabinete gallego se había limitado a examinar las realizaciones de gobierno y preparar actividades futuras.

El asunto principal de este año es preparar el programa electoral de los populares para los comicios autonómicos, inicialmente previstos para el próximo mes de octubre.

El retiro del Gobierno gallego ha obligado a los monjes cistercienses a saltarse la norma que impide pernoctar en el monasterio a las mujeres y evitar de ese modo que la consejera de Familia, Manuela López Besteiro, pudiera sentirse discriminada.

Según informaron a Servimedia fuentes del propio monasterio, la jornada gubernamental incluye dos reuniones diarias, de 9 a 2 y de 4 a 8,30, con una pausa para la comida, en la que como corresponde a estos tiempos de cuaresma, está excluída la carne.

Fraa y sus consejeros degustaron ayer una paella de marisco y en la jornada de hoy guardaron la abstinencia con un preparado de bacalao. La actividad en el monasterio queda paralizada tras la cena de las nueve de la noche. El retiro monacal finalizará mañana a las once de la mañana.