Cuando tomó posesión de su cargo, hace dos años, Fraga anunció la aprobación del proyecto de ley de comarcalización durante 1990, pero finalmente ha tenido que dar marcha atrás.

La comarcalización es ahora una cuestión a medio plazo, tras las fricciones en el propio Partido Popular y la rebelión del presidente de la Diputación de Lugo y senador, Francisco Cacharro Pardo.

Fraga parece haber optado por no abrir brechas en sus filas, cuando queda poco más de un año y medio parala conclusión de la legislatura.

Según el presidente de la Xunta, "habrá comarcas cuando estemos todos de acuerdo", algo difícil de lograr incluso entre los dirigentes de su propio partido. Cacharro Pardo ha sido la voz más crítica, asegurando que la comarca no tiene raíces en Galicia y que su creación sólo incrementaría los gastos en burocracia.

No obstante, el presidente gallego calificó estas discrepancias como deseos de mejorar el proyecto, que fuentes de la Xunta anunciaron hace diez días qu estaría listo en el plazo de un mes.

Por último, el líder del PP en Galicia reiteró que "nuestra intención es dar participación en este tema a todas las fuerzas políticas y administraciones, lo que incluye a las diputaciones provinciales". Además, confirmó que las comarcas no tendrán entidad jurídica propia.