En declaraciones a Servimedia, Suárez del Toro, que es también presidente de la Cruz Roja Española desde hace siete años, destacó su deseo de "hacer de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja un factor de paz, solidaridad y convivencia, así como un referente insustituible del quehacer humanitario, ya sea en tiempos de guerra o en situación de az".

Asimismo, resaltó la importancia de "promover la tolerancia, la no violencia en la comunidad y el respeto por la diversidad cultural, reduciendo la discriminación y contribuyendo a mantener la paz en el mundo".

Con su nombramiento como presidente de la Federación Internacional, de la que son miembros 178 países, Juan Manuel Suárez del Toro se pone al frente de las sesenta delegaciones de que dispone repartidas por todo el mundo, cuya sede central se encuentra en la ciudad suiza de Ginebra. La Federación Internacional es el órgano rector de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja que, junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja, forman el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.

Respecto a la situación que vive actualmente Afganistán, Suárez del Toro la calificó de "compleja" y expresó su preocupación porque la misma "se agrave por momentos con la llegada del invierno. Cada vez son más personas las que dependen de la ayuda internacional", señaló.

"La orgaización", subrayó el presidente de la institución humanitaria, "sigue trabajando dentro y fuera del país, reforzando la colaboración entre los países vecinos de Afganistán para que puedan actuar en los campos de refugiados y el resto de sociedades consiguiendo la ayuda humanitaria para transportarla allí donde se necesita".