Esta petición se ha producido después de que el diario "El Mundo" publicase ayer que una empresa privada controló el uso del catalán en historias clínicas sin el consentimiento de los pacientes y sin garantías de anonimato en los nombres de los enfermos.

Albert Jovell, presidente del Foro, afirmó en un comunicadoque "la calidad de la atención sanitaria depende de la información proporcionada y compartida entre médicos y pacientes, por lo que la confidencialidad, la confianza, la honestidad, la privacidad, la discreción y la lealtad constituyen derechos humanos y principios básicos de la relación entre los médicos y los enfermos".

Jovell señaló que la confidencialidad significa que "los pacientes son los propietarios de la información referente a su enfermedad y a su persona, y que tienen derecho a recibir la garantía de respeto a la privacidad y a la intimidad cuando proporcionan información a sus médicos y reciben información de éstos".

Al vulnerar este derecho a la confidencialidad, añadió, se ha faltado al respeto a la dignidad de los pacientes y se ha causado un daño a las profesiones sanitarias y a la sociedad en general, ya que se ha generado desconfianza por parte de los pacientes.

Por ello, el Foro ha realizado una serie de peticiones para el cumplimiento correcto del acceso a las historias clínicas, incluyendo que haya un formulario de consentimiento informado proporcionado por el médico y firmado por el paciente.

Este procedimiento, según el Foro, debería repetirse siempre que la información relativa al paciente sea usada de forma ajena a la autorizada en el formulario inicial. Una vez firmado, tendría que ser aprobado por el Comité de Etica Asistencial del centro en cuestión.

Además, piden que se incluya en el plan de estudios de las carreras sanitarias una materia relacionada con la ética y los derechos de los pacientes.