La iniciativa de este servicio nace de una decisión del Consejo de la Unión Europea. El Gobierno español ha cubierto ya el trámite de enviar el proyecto de decreto al Consejo asesor de Telecomunicaciones y al Consejo de Estado, para después someterlo a la aprobación del Consejo de Ministros.

Con el número 112, que será el mismo para todos los países de la Unión Europea, cualquier ciudadano accederá a los serviios de asistencia del Estado sin necesidad de memorizar números distintos para cada una de las áreas de asistencia.

El proyecto de decreto prevé que las llamadas sean gratuitas, independientemente del lugar y el terminal telefónico utilizado, sean desde el domicilio o desde cualquier cabina pública.

Los titulares de estos servicios serán las comunidades autónomas, que estarán encargadas de establecer los centros de recepción y su cobertura geográfica.