En una rueda de prensa, Obrador reiteró que si los pilotos reciben "un aval hecho por profesionales" que garantice que la creación de Catair no repercutirá en sus puestos y condiciones de trabajo, la huelga será desconvocada.

Según Obrador, pese a que Enrique Donaire, director general de Iberia, manifestó en la prensa que se comprometía ante notario a garantizar el trabajo de los pilotos, hasta ahora no han recibido ninguna propuesta en firme de la compañía, por lo que mantuvo que el objetivo de Iberia "es hacer crecer Catair para vaciar Iberia".

El representante del Sepla indicó también que el sindicato trasladó un borrador de garantías a la compañía que ha sido ignorado.

Por otro lado, Obrador criticó que Iberia haya publicado durante los tres últimos días anuncios en prensa en los que culpab a los pilotos y "miente" sobre el futuro de Barcelona.

También criticó a CCOO y a UGT, a quienes acusó de defender el derecho de huelga sólo para ellos y de estar a las órdenes del director de personal de Iberia.

Finalmente, Obrador negó que el Sepla hubiera pedido en algún momento que los pilotos de Iberia operaran los vuelos de Catair, afirmación que realizó el propio Obrador en una rueda de prensa el pasado 22 de junio.