Esta cuantía se enmarca dentro del Plan de Infraestructuras del Transporte 2000-2007, al que el Ejecutivo prevé destinar hasta el año 2010 un total de 103.000 millones de euros, de los que 39.800 millones irán a carreteras, otros 40.800 millones a ferrocarriles, 11.400 a aeropuertos, 7.500 millones a puertos y el dinero restante a otros capítulos.

En el caso concreto del año 2004, se van a destinar un total de 6.607 millones de euos a la construcción de ferrocarriles, otros 4.106 millones de euros a carreteras y 592 más en transferencias en materia de vivienda. Blanco hizo estas explicaciones en el marco de las jornadas sobre los Presupuestos de 2004 organizadas por el PP.

En los cuatro años que se lleva de desarrollo del Plan de Infraestructuras del Transporte, de 2000 a 2004, se van a haber destinado 48.500 millones de euros, frente a los 43.200 millones que estaban inicialmente previstos.

Este aumento de la inversión s está produciendo "gracias" al equilibrio presupuestario, y no se está viendo lastrado, según Blanco, por la política del Gobierno de equiparar los ingresos y los gastos del Estado.

El año que viene experimentarán un fuerte impulso, según el secretario de Estado, las obras en las carreteras de gran capacidad como la autovía del Cantábrico, la vía de la Plata, la unión entre el Cantábrico y la Meseta o el eje que unirá de oeste a este la Península, de Extremadura a Levante.

En materia de alta veloidad ferroviaria, el secretario de Estado de Infraestructuras resaltó los avances en el AVE a Levante desde Madrid y la construcción de los túneles de Guadarrama.

En cuanto a la vivienda, el gasto público va a crecer en ayudas directas un 2,6%, ascendiendo a 592 millones de euros, mientras que el gasto fiscal supondrán 5.517 millones de euros, un 15,22% más. En total, el importe destinado a políticas de vivienda se eleva a 6.009 millones de euros, un 13% más que en 2003.