En una entrevista difundida a través de su propia página web, el economista jefe del FMI, Simon Johnson, asegura que "ahora mismo el mercado petrólero está tensionado y no hay un suministro adicional que pueda llegar a muy corto plazo y parece que el mercado va a seguir bajo presión durante algún tiempo".

No obstante, Johnson sostiene que, a la larga, el suministro de petróleo acabará echando abajo los elevados precios actuales.

En términos coloquiales, el economista jefe explica que "sucede con frecuencia cuando hay un gran aumento en los precios de bienes básicos que la gente inicialmente se echa las manos a la cabeza y dice: '¡Dios mío! El mundo es demasiado pequeño, hay demasiada gente, hay demasiado competencia por los recursos'".

"Pero luego", asegura, "la tecnología encuentra un camino y, por supuesto, hay mucha gente que puede ganar dinero mediante la exploración y la extracción de más petróleo".

Johnson sí admite que la actual carestía de la energía y los alimentos están teniendo un impacto especialmente negativo en los sectores más necesitadas de los países en desarrollo.