La Fiscalía rebajó en 10 años su petición de cárcel al tener que retirar la acusación de pertenencia a banda armada debido a que López Resina ya fue juzgada por este delito en Francia.

Por lo tanto, Gordillo tan sólo acusó a López Resina de los delitos de tenencia de armas y explosivos, falsificación de documentos oficiales, alteración o sustitución de placas de matrícula y utilización ilegítima de vehículos de motor.

Según se desprendió de las declaraciones que varios agentes de la Guardia Civil efecturaron en la vista de hoy, el comando, del que también formaban parte los terroristas Luis Ángel Galarza e Iñaki Recarte, ya condenados por estos hechos, realizó en Santander un seguimiento a militares, a guardias civiles y a diversas personalidades con la finalidad de cometer atentados.

Finalmente, los terroristas no pudieron llevar a cabo ninguna de las acciones planeadas porque Galarza y Recarte fueron detenidos por la Guardia Civil el 18 de marzo de 1992 en Bilbao, lo que provocó la huida de López Resina.

PROCLAMAS A ETA EN CATALÁN

Al inicio del juicio, dentro del turno de palabra para la acusada, López Resina, nacida en Almería, dijo ser miembro de ETA y señaló que no reconoce la autoridad del tribunal para juzgarla.

Al igual que en los cuatro juicio anteriores que la Audiencia Nacional ha celebrado contra ella, la etarra hizo estas manifestaciones en catalán y acabo gritando "gora ETA".

En el vista comparecieron como testigos 14 agentes de la Guardía Civil, quienes explicaron que en el registro de los pisos francos alquilados por López Resina para el comando se incuataron, entre otros materiales, varias granadas, un artefacto tipo lapa, 50,5 kilos de amonal, 4,5 kilos de pólvora, cuatro temporizadores y un subfusil, así como informaciones sobre las fuerzas de seguridad.

Varios de estos agentes señalaron que, desde uno de los pisos francos, los terroristas vigilaban un cuartel militar que se encontraba enfrente del inmueble.

Durante el juicio también comparecieron como testigos los compañeros de comando de López Resina, Galarza y Recarte, quienes, acogiéndose a la doctrina del Tribunal Supremo, se negaron a declarar al haber sido condenados por los mismos hechos.

DOS PISOS FRANCOS EN SANTANDER

Según relató el fiscal Gordillo en sus conclusiones definitivas, la acusada, por orden de la dirección de la banda terrorista, se desplazó hasta Santander, donde alquiló un primer piso el 16 de diciembre de 1991 y un segundo a mediados de enero de 1992.

El 19 de enero de 1992, Galarza y Recarte, que se encontraban en Francia, cruzaron la frontera después de recibir del dirigente de ETA Francisco Múgica Garmendia dos pistolas, munición, documentación falsa y 6.000 euros.

Galarza y Recarte se dirigieron a Santander y se instalaron en los apartamentos previamente alquilados por López Resina, pero el "comando Mugarri" se disolvió sin llevar a cabo ninguna acción terrorista tras la detención de Galarza y recartes el 18 de marzo de 1992 en Bilbao.

López Resina fue detenida el 23 de septiembre de 2001 en Dax (Francia) y entregada de forma temporal por las autoridades francesas el 10 de julio de 2007.

Tras escuchar a los testigos y las conclusiones de las partes, la presidenta del tribunal, la jueza Manuela Fernández de Prado, decretó el visto para sentencia.