LA FISCALIA QUIERE QUE EL SUPREMO FIJE LOS LIMITES A LA LIBERTAD DE EXPRESION DE LOS POLITICOS FUERA DEL PARLAMENTO - A partir del recurso contra la absolución de Otegi por llamar "jefe de los torturadores" al Rey
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El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, quiere que el Tribunal Supremo determine hasta dónde llega el derecho a la libertad de expresión de los políticos fuera de sede parlamentaria, como es el caso de las afirmaciones realizadas en mítines o ruedas de prensa.
Fuentes del Ministerio Público explicaron a Servimedia que este asunto será planteado en el marco del recurso de casación que el fiscal va a presentar contra la decisión de la Justicia vasca de absolver a Arnaldo Otegi, portavoz de la ilegalizada Batasuna, de un delito de injurias por haber calificado al Rey de "jefe de los torturadores".
La Fiscalía General del Estado presentará hoy ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco su anuncio de que va a recurrir la sentencia sobre Otegi ante el Supremo.
Las fuentes consultadas indicaron que la Fiscalía entiende que debe acotarse hasta dónde llega el derecho a la opinión de los políticos en mítines y otros eventos, en contraposición a lo que manifiestan en sede parlamentaria, algo que está especialmente protegido por la ley.
La institución que dirige Conde-Pumpido entiende que hay manifestaciones que realizan los políticos fuera de los parlamentos que rozan lo delictivo, y que en el caso de la afirmación de Otegi contra el Rey supone algo claramente injurioso que no debería estar protegido.
Para la Fiscalía, no es válido, como hizo la Justicia vasca, encuadrar en el derecho a la libertad de opinión que el portavoz de Batasuna califique a don Juan Carlos de "jefe de los torturadores". Según el Ministerio Público, el Supremo debe fijar límites a la "libertad de expresión política" cuando choca con otros derechos fundamentales, como el derecho a no ser injuriado o calumniado.
(SERVIMEDIA)
04 Abr 2005
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