Según explicaron fuentes judiciales, la fiscalía de Medio Ambiente solicitó al gerente de la Junta de Saneamiento una relación de los expedientes abiertos a la empresa Ludesa, de Martorell (Barcelona), por presuntos delitos contra el medio ambiente y García Coma respondió por escrito que no existía nnguno.

Días después, según las mismas fuentes, la fiscalía comunicó al responsable de la Junta de Saneamiento que tenía conocimiento de que Ludesa, que se dedica al tratamiento de residuos industriales, había tenido 9 expedientes en los últimos años. Antoni García Coma envió, posteriormente, la notificación de 15 expedientes abiertos contra la empresa, la mayoría de los cuales no coincidía con los anteriores.

La fiscalía de Medio Ambiente considera que la Junta de Saneamiento podía disponer antesde los datos sobre la situación de Ludesa, ya que este organismo heredó el archivo de expedientes de la anterior administración.