La querella, presentada por el fiscal Jesús Santos y cuyo estudio ha recaido en el juzgado de instrucción número cinco, dirigido por Baltasar Garzón, se basa en unas manifestacions que el juez Navarro realizó el pasado 28 de noviembre al diario "Gara" contra el presidente del Gobierno, José María Aznar, y en las que también criticaba a Garzón.

En las manifestaciones al diario "Gara", próximo a Herri Batasuna, Navarro dijo que era una afirmación "propia de un terrorista" que el jefe del Ejecutivo hubiese defendido que los menores que cometen atentados deben ser considerados directamente como terroristas.

Sobre Garzón, opinó que es un magistrado que en sus investigaciones s lo inventa "casi todo" y que actúa en "unión hipostática" con el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja.

Las declaraciones de Navarro al "Gara" ya dieron lugar a que el Consejo General del Poder Judicial le abriera, en diciembre del año pasado, un expediente disciplinario.

En esa ocasión, Navarro, que es presidente de la Sección Décima de la Audiencia Provincial de Madrid, respondió a la decisión del CGPJ afirmando que el órgano de gobierno de los jueces no tiene "legitimidad" para "entrometere en mi libertad de expresión".

El juez Baltasar Garzón deberá decidir si admite o rechaza la querella. Según las fuentes jurídicas consultadas, debería inhibirse y pasar el caso a otro magistrado para hacerse cargo de la causa, ya que él es parte afectada.