Kasper reconoció que un control riguroso de las movimientos internacionales de dnero podría repercutir en el confort de los suizos, ya que descendería el volumen de negocio de sus entidades bancarias. Sin embargó, precisó que Suiza puede eliminar esa parte "negra" de su historia y mantener su nivel económico.

No obstante, insistió en que este planteamiento no es compartido por todos los magistrados suizos, ya que, a su juicio, muchos de ellos mantienen todavía una actitud muy conservadora y reticente, que les lleva a no tomar medidas contundentes contra la corrupción económica. En este sentido, el fiscal suizo indicó que el sistema judicial europeo debería abordar una serie de reformas para hacer más ágil la justicia, como por ejemplo que no tengan que intervenir en un mismo caso el juez de instrucción y el fiscal, ya que "se pierde mucho tiempo en la investigación".

Además, destacó que la prensa juega un papel importante en la lucha contra la corrupción, aunque advirtió que a largo plazo podría ser perjudicial, puesto que detrás de los medios de comunicación se mueven muhos intereses de carácter comercial y político.

Kasper no quiso hacer ninguna referencia al 'caso Rubio' y explicó que el 'dossier' de este asunto está ya en manos de un juez, circunstacia que, según explicó, le impide comentar cualquier aspecto de la investigación relacionado con el ex gobernador del Banco de España.

Laurent Kasper participó hoy en el seminario "El llamado dinero negro", dentro de los cursos de verano de El Escorial, organizados por la Universidad Complutense.