Según las mismas fuentes, la Fiscalía de la Audiencia Nacional no está de acuerdo en que la difusión del citado vídeo se realizó en el mero ejercicio de la profesión periodística, por lo que ha presentado un recurso de reorma, subsidiario de apelación.

Para el departamento que dirige Eduardo Fungairiño, la emisión de la cinta por parte de la televisión autonómica vasca supone un "enaltecimiento del terrorismo".

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, Guillermo Ruiz Polanco, encargado del caso, archivó la querella en contra de la opinión del fiscal.

La querella iba dirigida contra Andoni Ortuzar, director general de EiTB; Bingen Zupiria, director de la Televisión vasca(ETB); y Julián Beloki, director de la Radio Vasca (EiTB Irratia), así como contra el entonces presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Xabier Arzalluz.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional había pedido una semana antes la imputación de Bingen Zupiría y de Andoni Ortúzar por un presunto delito de enaltecimiento del terrorismo.

Sin embargo, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional considera que no se aprecia en los hechos "indicios de acción delictivaalguna" y, por el contrario, elogia la "cautela" demostrada por ETB para no asumir en su información el "lenguaje del terror" de ETA.

"Los extractos difundidos fueron seleccionados con suma cautela, evitando reproducir las expresiones propagandísticas y las que encarnan el habitual lenguaje del terror", dice el magistrado en su resolución.

A juicio del magistrado, el examen y valoración de la cinta de vídeo emitida por ETB "excluye otra consideración que no sea la relativa al lícito ejercicio de na profesión, al desempeño ordinario de la actividad meramente periodística, al ánimo de divulgación de una noticia ciertamente interesante para la mayoría de los ciudadanos en la ocasión electoral en que se produjo y se difundió".

EL COMUNICADO

En el comunicado leído por los miembros de ETA, la banda criminal señalaba que no había declarado "ningún alto el fuego táctico", al tiempo que aseguraba que el "plan Ibarretxe" no busca una solución, sino que es "excluyente, cerrado y no favorece el arreglo.

Al mismo tiempo, los etarras volvían a hacer un llamamiento a los simpatizantes de la izquierda "abertzale" para que votasen nulo en los comicios del 25 de mayo, lo que sería una respuesta a la ilegalización de Batasuna y a la anulación de las candidaturas de AuB y otras plataformas afines.