La procesada negó las imputaciones de su vinculación con la organización, aunque reconoció militar en el PCE (r), rama política de los Grapo (Grupos Revolucionarios Antifascistas Primero de Octubre).

El ministerio público basó su acusación en las declaraciones policiales de Mercedes Padrós y Francisco Javier Ros Díaz, integrantes del "comando", que ya fueron condenados e 1985 por esta acción.

Ambos implicaron a Milagros Caballero, pero hoy declararon ante el tribunal que fue bajo presiones y torturas y afirmaron no haber tenido nunca relación con la procesada.

El atentado fue cometido en enero de 1984, cuando 4 miembros de la banda terrorista, uno de ellos sin identificar, se apostaron en el Camino Viejo de Leganés, en el barrio de Carabanchel, a la espera del paso de un coche policial que patrullaba habitualmente por la zona.

Sobre las 8,15 horas, el vehíclo, ocupado por los funcionarios José Antonio Requena Duarte y Marcelino Clemente Vaquero, se detuvo ante un semáforo en rojo. En ese momento, Mercedes Padrós se acercó a la ventanilla del conductor para llamar la atención de los policías, mientras Javier Ros ametrallaba a los funcionarios desde el lado opuesto a corta distancia.

Milagros Caballero fue declarada rebelde en 1985, año en que escapó a Francia, donde fue detenida junto a otros miembros de la organización, para ser extraditada a España en989.

El fiscal estima que su participación en el atentado fue directa y solicita una pena de 58 años de reclusión como autora de dos delitos de asesinato.