La juez titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Avilés ha decretado la apertura de un juicio oral a petición del fiscal, quien hace constar en su informe que los hechos ocurrieron el paado 22 de abril de 1994 cuando se celebraba una reunión en las oficinas de Ensidesa en Avilés para abordar varios problemas laborales en la factoria.

En la reunión se encontraban el consejero delegado de la empresa, Juan Ignacio López Aranguren, el jefe de personal de la factoría de Ensidesa-Gijón, José Laudelino Hevia, el director de esta última factoría, Alfonso Carlos Rodríguez, y el secretario del comité de empresa de la fábrica de Gijón, Gillermo Miranda.

Poco después de iniciarse la reunión varios trabajadores irrumpieron en las dependencias de la fábrica profiriendo gritos y golpeando puertas, ventanas y paredes, por lo que la reunión tuvo que ser suspendida.

Según el fiscal, los directivos decidieron permanecer en el interior de las oficinas para evitar agresiones físicas dada la violenta situación. Sin embargo, horas después uno de los ahora acusados, en una nueva reunión, insinuó que la posibilidad de riesgo físico para quienes abandonasen las oficinas.

La situación quedó solvetada a la mañana siguiente cuando la Guardia Civil entró por sorpresa en las dependencias para liberar a los retenidos.

El fiscal pide en conjunto 9 años para los seis sindicalistas (4 de CCOO, uno de UGT y otro de la Corriente Sindical de Izquierdas) y una multa de 100.000 pesetas a cada uno de los acusados en concepto de desperfectos ocasionados por la irrupción de la Guardia Civil para liberar a los retenidos.