EL FISCAL PIDE 40 AÑOS PARA "EL DESCUARTIZADOR DE CADIZ"

CADIZ
SERVIMEDIA

El fiscal pidió hoy 40 años de cárcel para José Juan Martín Montañés, conocido como "el descuartizador de Cádiz", acusado de matar y escuartizar a su amigo Javier Suárez Samaniego, en la noche del 21 de enero de 1989. Posteriormente pidió un rescate a los padres de la víctima, para lo que previamente guardó en formol las manos con el fin de ir enviándoles los dedos.

La vista, que comenzó a las 10,30 de la mañana de hoy, se celebra en la sala de plenos de la diputación, ante la falta de espacio en la sección cuarta de la audiencia provincial.

Tras el relato de los hechos por el Ministerio Público, el acusado se negó a respondera las preguntas del fiscal y de la acusación privada, por lo que ambos desistieron de interrogarle.

Llamó especialmente la atención de los presentes la frialdad y el tecnicismo empleados por el acusado al relatar el crimen, que no negó en ningún momento. Incluso fue más explícito hoy que en sus declaraciones en comisaría y ante el juez cuando fue detenido.

A preguntas del defensor, Juan Manuel Jareño, dijo que en la comisaría no quiso ser más explícito por las presiones que recibía y para termina cuanto antes con los golpes que le propinó la policía.

El letrado aseguró que la policía llegó incluso a asomarle por la ventana y, mostrándole las personas que se encontraban en esos instantes en la entrada del edificio, le dijo que querían lincharle.

José Juan Martín Montañés se negó a insistir sobre el contenido de una carta que envió a su padre y que está incluida en el sumario. En ella decía que su amigo Javier pretendió mantener relaciones homosexuales, a lo que él se negó, y que durante l pelea que mantuvieron le golpeó con la pata de una mesa, causándole la muerte. Posteriormente descuartizó el cadáver.

En sus declaraciones de hoy, el presunto homicida aseguró que no había planeado matar a su amigo, lo que se contradice con su primera versión en comisaría, donde relató haber comprado previamente las bolsas para meter los restos del cadáver, haber rellenado la pata metálica de la mesa con arena de playa y haber abierto una cuenta corriente en la Caja de Ahorros de Cádiz con nombre supesto.

Martín Montañés explicó hoy que durante el traslado de los restos en bolsas, para lo que tuvo que recorrer a pie una considerable distancia, fue ayudado por algunos viandantes, que naturalmente desconocían el contenido.

La acusación privada, ejercida por el letrado Pedro Fernández Enríquez, solicitó 46 años de cárcel por los delitos de asesinato, falsificación de documento, profanación de cadáver y amenazas. Se prevé que el juicio dure hasta el viernes.

(SERVIMEDIA)
08 Abr 1991
CAA