El acusado, de 43 años, está acusado de matar a María Jesús Blasco Radio, de 20 años, administrativa de la escuela, y herr de gravedad al director, José Antonio Lorente García, y a la mujer de éste, Araceli Espigares Hernández, el 25 de octubre de 1989.

En el juicio celebrado hoy en la sala octava de la Audiencia de Barcelona, el acusado declaró que su intención era "intimidar al propietario del centro y a su mujer", pero que no quería causarles más daños. Según el presunto homicida, el matrimonio quería despedirlo sin pagarle el dinero que le correspondía.

Según las conclusiones del fiscal, Brandon "cogió un cuchilo de cocina de su domicilio de Barcelona en la convicción de que iba a ser sustituido por otra profesora en el centro y que no se le iba a pagar lo que él creía que se le adeudaba".

Del informe se desprende que antes de dirigirse a la academia, el procesado visitó a Janet Henderson, profesora que le había sustituido en anteriores ocasiones, quien le confirmó que José Antonio Lorente no quería que continuara como profesor y que ella se iba a hacer cargo de las clases al día siguiente.

El profesorde inglés acuchilló, pocas horas más tarde, al propietario de la academia, después de que éste le entregara un talón de 22.000 pesetas para saldar la deuda de su mes de trabajo. José Antonio Lorente consiguió salvarse aunque el pronóstico de su estado fue gravísimo.

La segunda víctima de Edward Brandon fue una empleada de la escuela, que acudió alarmada por los gritos del director hasta donde se encontraba el acusado. Según el fiscal, "éste le asestó un fuerte golpe con el cuchillo en la fosa yugular" María Jesús Blasco falleció a causa del shock hemorrágico.

La tercera persona agredida fue Araceli Espigares, a quien le asestó tres puñaladas. A pesar de que la mujer se encontraba entonces en estado de gestación, las heridas no dañaron el feto.

Brandon, que fue detenido en su domicilio de Barcelona al día siguiente de los sucesos, ha permanecido en prisión preventiva desde el 27 de octubre de 1989. Cuando sucedieron los hechos hacía un año y medio que trabajaba en la academia de Martorell y viía en España desde hacía siete.

El fiscal del caso solicita el ingreso de Brandon en un centro psiquiátrico, ya que es "poseedor de una personalidad paranoide", mientras que la defensa pide la absolución y alega eximente completa de enajenación mental, además de su internamiento en un hospital mental.

Durante el juicio, el presunto asesino confirmó que antes de vivir en España había permanecido en un sanatorio de Alemania, tras intentar prender fuego a la redacción de una revista cuyo editor era l ex canciller Helmut Smith.

Brandon ha declarado ser hijo de este político y a la vez pertenecer a la familia real alemana. El acusado afirma que es nieto bastardo de Guillermo II, el último emperador.