ETA

EL FISCAL PIDE 21 AÑOS DE CÁRCEL PARA EL ETARRA DETENIDO EN SANTANDER EN 2007 CUANDO PREPARABA UNA CAMPAÑA DE ATENTADOS

MADRID
SERVIMEDIA

El fiscal Miguel Ángel Carballo pidió hoy en la Audiencia Nacional 21 años de prisión para el presunto etarra Aritz Arguinzoniz, detenido en la estación de autobuses de Santander en julio de 2007 cuando supuestamente preparaba una campaña de atentados en Cantabria.

Arguinzoniz fue detenido el 10 de julio de 2007 en la estación de autobuses de Santander. En su mochila, los agentes encontraron una pistola "preparada para ser utilizada", según señalaron los peritos en el juicio oral celebrado hoy, varios cartuchos, un temporizador con el anagrama de ETA, documentación falsa así como un listado manuscrito con objetivos potenciales.

Durante el juicio celebrado hoy por la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, el fiscal elevó a definitivas sus conclusiones provisionales y acusó a Arguinzoniz de los delitos de pertenencia a ETA, tenencia ilícita de explosivos con finalidad terrorista, falsificación de documentos oficiales y tenencia ilícita de armas.

Arguinzoniz se negó a declarar ante el tribunal, y tan sólo señaló al inicio del juicio, hablando en euskera, que no quería participar "en esta farsa". La única defensa que ejerció su letrado consistió en argumentar que no se puede condenar a su cliente por tenencia de explosivos ya que sólo se le incuató un temporizador, un elemento que por si sólo no constituye ningún "peligro" y que puede ser encontrado en cualquier electrodoméstico.

Por su parte, el fiscal defendió durante el juicio que el acusado no sufrió malos tratos tras su arresto y que no fue presionado para declarar durante su estancia en sede policial, algo que fue ratificado por los agentes que testificaron durante la vista oral.

Además, destacó que al ser detenido, Arguinzoniz portaba un arma "preparada para ser utilizada, con una bala en la recamara" y que se identificó ante los agentes como miembro de ETA.

LISTA DE OBJETIVOS

Carballo sostiene que Arguinzoniz, después de ser captado para la organización terrorista en agosto de 2006 por el dirigente de ETA Garikoitz Aspiazu, alias "Txeroki", ocultó en su domicilio de Elorrio (Vizcaya) a los etarras Garikoitz Etxeberria y Saioa Sánchez, a quienes ayudó en sus desplazamientos y compras.

El 22 de diciembre de ese año, Sánchez llamó al acusado para advertirle de que debía huir a Francia porque en Amorebieta les habían sorprendido dejando dinero, material explosivo y herramientas.

Durante su estancia en Francia, Arguinzoniz y Sánchez recibieron un cursillo de armas y explosivos, según sostiene el fiscal Carballo.

El 29 de junio de 2007, el acusado, junto con el etarra conocido como "Sorgin", cuya identidad se desconoce, mantuvieron una reunión con "Txeroki" en la localidad francesa de Garazi.

El encuentro sirvió para que el por entonces jefe de comandos de ETA les entregara una lista con objetivos contra los que atentar en Cantabria. Entre esos objetivos destacan los juzgados de Santander, la Comisaría de Policía de la Plaza Porticada, la sede central de Telefónica y la Plaza del Ayuntamiento.

Al terminar la reunión, "Txeroki" entregó a Arguinzoniz una pistola y le indicó que debía recoger en la localidad de Usansolo (Vizcaya) 50 kilos de explosivo amonal, una pala, un taladro, destornilladores y teléfonos móviles.

El 30 de junio, el acusado y "Sorgin" cruzaron la frontera en bicicleta y, posteriormente, se desplazaron hasta la localidad cántabra de Laredo.

Tras recoger los materiales almacenados en Usansolo, los dos etarras se dirigieron a Santander, ciudad en la que llegaron a hacer las primeras comprobaciones de objetivos para llevar a cabo un atentado. El acusado fue detenido diez días después, mientras que "Sorgin" se encuentra en paradero desconocido.

Tras escuchar los argumentos del fiscal Carballo y del abogado de la defensa, la presidenta del tribunal, Angela Murillo, pronunció el visto para sentencia.

(SERVIMEDIA)
12 Ene 2009
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