Dos de los procesados reconocieron su pertenencia al citado "comando" trrorista, si bien exculparon a "Musar", al que, según su versión, engañaron para utilizar su nombre en la escritura de compra-venta del local donde guardaban los automóviles.

Explicaron que aunque "Musar" les acompañaba en ocasiones, siempre ignoró que fueran de ETA y el contenido del local, ya que todas las armas y explosivos se guardaban en el interior de los coches, se tapaban con mantas, de forma que cualquier persona que entrará sólo vería un "parking".

Por su parte, Antonio María Otamendi, Musar", negó pertenecer a ETA y haber colaborado, en su condición de carrocero, con la banda terrorista.

"Peio" y Eduardo Aguirre confirmaron que desde 1981 robaron coches a los que el primero de ellos cambiaba las matrículas y pintaba de otro color, mientras que Aguirre cargaba los coches de explosivos.

Según el ministerio público, el "comando" recibía órdenes directas de Juan Lorenzo Lasa Mitxelena y Santiago Arróspide Sarasola, que les indicaban donde tenían que dejar los vehículos.

El "cmando parque" fue dasarticulado en enero de 1988 y se le imputa la sustracción de al menos 32 vehículos, entre ellos los coches-bomba que el "comando itinerante" utilizó en los atentados contra la Dirección General de la Guardia Civil y en el asesinato del general Luis Rosón.

El fiscal considera, en sus conclusiones provisionales, que estos hechos son constitutivos de un delito continuado de robo con fuerza, falsedad de placas, pertenencia a banda terrorista, depósito de armas de guerra y tenencia de xplosivos, por los que pide penas que suman un total de 207 años de prisión.

El juicio fue suspendido cuando todavía queda por prácticar la prueba documental y se está pendiente de que las diferentes partes emitan sus informes. Aunque aún no ha sido fijada la fecha definitiva, está previsto que la vista continúe el próximo día 22.