Arnaldo Otegi compareció como imputado en relación a los 108 actos violentos ocurridos en la huelga convocada el 9 de marzo, en el País Vasco y Navarra por la ilegalizada formación abertzale.

Otegi no respondió a las preguntas que le formularon las acusaciones, pero realizó dos exposiciones sobre actividad política.

Aunque el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, anunció en su día que pediría esta medida para el dirigente abertzale, lo cierto es que hoy el Ministerio Público, representado por Jesús Santos, fiscal jefe en funciones de la Audiencia Nacional, finalmente solicitó que se eleve a 500.000 euros la fianza que se impuso a Otegi en mayo de 2005 para no eludir la prisión provisional.

Otegi se encuentra en libertad bajo fianza de 400.000 euros desde el 26 de mayo de 2005, imputado por un presunto delito de integración en organización terrorista, dentro de este caso, el sumario 35/02, en el que se investiga la relación de la ilegalizada formación "abertzale" con ETA y la presunta financiación de la banda terrorista a través de las "herriko tabernas".

La Fiscalía de la Audiencia Nacional solicitó también una serie de medidas cautelares para que el imputado esté a disposición del juzgado y controlado en todo momento. Se da la circunstancia de que en la comparecencia de Otegi no estuvieron los dos fiscales encargados de este caso, Juan Moral y Jesús Alonso.

Por su parte, los abogados de la Asociación Víctimas del Terrorismo y de Dignidad y Justicia sí pidieron prision incondicional para Otegi. El responsable del Juzgado Central de Instrucciónnúmero 5 de la Audiencia Nacional comunicará su decisión a las partes a las 21,45 horas de esta noche.