El Pleno del CGPJ acordó ayer por unanimidad dar luz verde al nombramiento del nuevo fiscal general del Estado, pero mostró "su preocupación por las concretas manifestaciones inconstitucionales efectuadas por Cardenal en la Memoria de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco de 1994.

"A mi me parece una nota y un criterio muy acertado del Consejo General del Poder Judicial", dijo a Servimedia el responsable socialista, para añadir inmediatamente después: "yo creo que han señalado algo que otros habíamos visto antes".

"El señor Cardenal", dijo, "por un lado, reúne todas las condiciones de requisitos legales y trayectoria profesional para el cargo para el que lo quiern nombrar, pero, por otro lado, ha expresado en su función institucional opiniones que no parecen caber, no ya en una política mínimamente progresista ni siquiera de centro, sino que a veces chocan con preceptos y principios constitucionales".

Por ello, dijo Almunia que el órgano de Gobierno de los jueces "hace muy bien en señalarlo". Las críticas del portavoz del PSOE se suman a las que ayer realizó el propio secretario general del partido, Felipe González, quien se refirió con dureza al futuro fisca general del Estado.

González expresó su respeto a la persona de Cardenal y a su pensamiento, "por muy conservador que sea", pero advirtió que "en lo que contradice a la Constitución, en la legalidad no puede ser aplicado", en relación con la oposición frontal mostrada por Cardenal al aborto, la homosexualidad y el divorcio.