Aunque no quiso valorar el auto desde el punto de vista jurídico, Ollero expresó en rueda de prensa su opinión de que la sociedad siente "incomodidad y desconcierto" porque parece que en política "se puede hacer todo, siempre que se disponga de una cabeza de turco que oportunamente soporte las consecuencias".

Ahora, dijo, los condenados cumpln una pena porque otras personas "se negaron a asumir toda responsabilidad política argumentando que esperarían a que los tribunales se pronunciaran".

A juicio de Ollero, cada vez queda más claro que esa actitud era "un intento de dilatar en el tiempo el problema y hacer revertir las consecuencias en otras personas".