Los servicios mínimos han sido fijados unilateralmente por el ministerio después de que fracasaran las negociaiones mantenidas la pasada semana entre representantes de la Administración, la patronal naviera Anesco y los nueve sindicatos convocantes de la huelga.

Estos servicios mínimos establecen que en cada autoridad portuaria trabajarán mañana diez personas, que se encargarán de las tareas de seguridad, teléfono, guardamuelles y grúas, entre otras, además de un vigilante para la flota, un oficial para la potabilizadora y la dotación normal de patrón, operador de esclusas, dos marineros y retén en el servici de esclusas.

En el servicio de draga trabajarán 6 personas y un mínimo de tres operarios en el servicio de remolcador. Asimismo, en cada centro de trabajo portuario dependiente de las autoridades portuarias los servicios mínimos serán de dos personas, mientras en señales marítimas trabajarán 5 personas.

En el caso de las sociedades estatales de estiba y desestiba, el ministerio traslada la fijación de los servicios mínimos a la autoridad portuaria, a quien deberán comunicar las sociedades sus prvisiones de movimiento de mercancías para mañana. En el Ente Público de Puertos del Estado trabajará mañana una persona por cada una de las direcciones del ente.

Fuentes sindicales consultadas por Servimedia señalaron que cumplirán los servicios mínimos impuestos por el ministerio, aunque calificaron de "abusivos" algunos de ellos, como los de los servicios de telefonista, conductores de furgonetas y camiones, señales marítimas y los de las direcciones del Ente Público de Puertos del Estado.

Las ismas fuentes señalaron que no aceptarán en las negociaciones que se lleven a cabo dentro de cada autoridad portuaria unos mínimos superiores y aseguraron que si imponen unos servicios mayores no los cumplirán.

La huelga ha sido convocada por los sindicatos del sector naval de UGT, CCOO, USO, CGT, LAB, CIGA, CIS, el Sindicato Obrero Canario (SOC) y la Coordinadora Estatal de Estibadores Portuarios en contra de la privatización de los servicios portuarios y en defensa de la modernización del sector, as como para desbloquear la negociación colectiva de este año.

Los sindicatos quieren forzar al Gobierno a que abra una negociación globlal sobre el desarrollo reglamentario de la Ley de Puertos, que entró en vigor el pasado 1 de enero y que, a su juicio, el Ejecutivo está aplicando "ahondando cada vez más en las ideas neoliberales".

Los sindicatos convocantes de la huelga, que afecta a más de 15.000 trabajadores del sector, esperan que el paro de mañana sea un éxito y obligue a la Administración asentarse a negociar. Aseguraron que si esto no ocurre, convocarán más huelgas y movilizaciones antes del 6 de junio, día de las elecciones generales.