Según informaron a Servimedia fuentes de CCOO, Fidalgo ha propuesto que el próximo lunes día 18 se reúna el Comité Confederal -en el que participan los miembros de la Ejecutiva con cartera y los líderes de federaciones y uniones- y la Ejecutiva Confederal.

La remodelación del Secretariado será el único punto del orden del día enambas reuniones, en las que se abordará, con toda probabilidad, el cese de Rodolfo Benito, "número dos" de la organización, al frente de sus responsabilidades en el sindicato.

El inicio de esta crisis se produjo a mediados de enero, cuando en una reunión del Secretariado de CCOO Fidalgo y Benito discreparon abiertamente por la forma en la que se dirigía el sindicato, el enfriamiento de la unidad con UGT y la forma de afrontar el problema de los trabajadores de Sintel.

Benito reprocha al secretari general su excesiva propensión a pactar con el Gobierno y el no mantenerse al lado de los trabajadores de Sintel ahora que estos defienden la viabilidad del proyecto de la empresa rusa Televik.

La llegada de José María Fidalgo a la Secretaría General de CCOO se produjo tras la celebración del VII Congreso Confederal, celebrado en marzo del 2000. Entonces los candidatos eran el secretario de la Federación Minerometalúrgica, Ignacio Fernández-Toxo, Rodolfo Benito, que lideraba la Unión Sindical de Madrd-Región, y el propio Fidalgo.

El apoyo que Benito otorgó a Fidalgo permitió a éste hacerse con el liderato del sindicato, ya que Fernández-Toxo prefirió retirarse y colaborar con la nueva dirección. Ahora, los equilibrios que permitieron a Fidalgo ocupar la dirección de CCOO se rompen.

Benito advirtió la pasada semana que su posible cese provocaría una grave crisis en el sindicato, en lugar de solucionar los actuales problemas, e incluso se sugirió la necesidad de convocar un Congreso ConfederalExtraordinario si finalmente se producía su despido.