En el Foro de la Nueva Sociedad, organizado por Nueva Economía Fórum con la colaboración de la Fundación ONCE y Caja Navarra, Fidalgo dio la razón al ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, quien ayer aseguró que los empresarios están más preocupados ahora por lograr liquidez que por negociar una reforma laboral.

"Están más preocupados por un problema de crédito que por los costes laborales", afirmó el dirigente sindical, quien subrayó que "habrá que hacer reformas laborales cuando sea el momento".

Asimismo, Fidalgo señaló que "en España hay siempre un salvavidas que se llama diálogo social", que, en su opinión, es "un intento desde la buena voluntad para evitar los males".

En este sentido, afirmó que en el proceso de diálogo social para esta legislatura se ha puesto encima de la mesa "un temario" y "además llevamos unas intenciones", que pasan por ofrecer "paz social" y una renovación del Acuerdo de Negociación Colectiva que "mantenga las rentas de los trabajadores" y que esto sea "compatible con las dificultades empresariales".

Además, se ofreció a mediar entre las distintas administraciones públicas para "ayudar en lo posible" a mejorar su colaboración y lograr que el sector público "sea uno, y no 17 pequeños". "Nos ofrecemos a mediar, si nos dejan", añadió.

En cuanto a las disensiones internas que vive la patronal CEOE, que llevaron a la dimisión de su secretario general, Juan Jiménez Aguilar, Fidalgo mostró su "deseo de que esto no sea una crisis", sino que se quede como "un asunto interno" y que "se resuelva democráticamente".

En este sentido, afirmó que la organización empresarial es "importantísima" y que no se alegra de los problemas que está pasando ya que si ella se "funde, igual luego nos fundimos nosotros".