La ley, vigente desde el pasado 14 de mayo, impone requisitos adicionales de etiquetado de productos alimentarios, ya que obliga a los productores a incluir en la etiqueta información sobre el origen, calidad, categoría, fecha deproducción, advertencias de riesgos previsibles y nombre del fabricante o productor (no permite el del importador), lo que contraviene la normativa comunitaria.

La ley autonómica prohíbe la utilización de nombres geográficos de las Islas Baleares y otorga potestad al Gobierno regional para reconocer derechos al respecto, lo que, según la FIAB, "colisiona con la normativa europea en materia de Denominaciones de Origen y Especificidad".

La FIAB estima que el Ejecutivo balear fomenta el proteccioniso al prohibir la venta de medios de producción y productos agroalimentarios a un precio inferior al de coste y disponer que determinará reglamentariamente un sistema para establecer el precio de coste.

"FIAB quiere manifestar que la proliferación de este tipo de iniciativas por parte de las legítimas autoridades regionales europeas pone en peligro los principios que defiende el acervo comunitario, como son la libre circulación de mercancías, la competencia leal, la protección al consumidor o la polítia agrícola común", concluye la nota.