Según Molinas, hay datos para argumentar el crecimiento "estable" contando siempre con una estabilización de la crisis política y unos tipos de cambio que no se desviarán de la paridad del poder adquisitivo.

Sin embargo, no existe tanto optimismo en cuanto a la evolución del déficit fiscal -ya que los ingresos por impuestos crecerán como lo han venido haciendo en los últimos años- ni de los niveles de desempleo, aunque, según Molinas, los mercados financieros y de bons se muestran poco preocupados por este indicador.

Para FG, a corto plazo se pueden reducir los gastos pero se necesitan reformas legales o estructurales profundas, ya que no se puede transferir estos recortes a compañías públicas, "porque lo único que se logra es posponer el problema aunque tenga efecto en las cifras oficiales".

OBJETIVOS DE CONVERGENCIA

Según FG, es improbable que los objetivos de convergencia se cumplan. Desde esta perspectiva apunta que el déficit se situará en torno al 6,5 del PIB.

En este sentido, el director de Economía de la sociedad de valores aseguró que FG no prevé movimientos futuros del Banco de España antes de finales de año ni cambios en la política monetaria durante los próximos doce meses.