Fernández de la Vega recibió con un caluroso discurso a la presidenta chilena, a quien entregó el Premio Nueva Economía Fórum en su edición de 2006, porque "nadie mejor que ella simboliza los valores que motivan su otorgamiento".

Expresó su "gran admiración y respeto" por Bachelet, y se erigió como portavoz de las "miles de personas en Chile y en España que han depositado un enorme caudal de ilusión y esperanza en la lucha por un país y una sociedad mejor", y la búsqueda de "un nuevo orden mundial más justo y más humano".

En su opinión, Bachelet reúne "rigor, capacidad de trabajo, persistencia, coraje, compromiso y una amplia experiencia política" en la que ha asumido los ministerios de Salud y de Defensa, convirtiéndose en la primera mujer al frente de la defensa nacional chilena.

La vicepresidenta subrayó que dirigió este ministerio "con lealtad y sin un ápice de rencor", demostrando su "gran sentido de Estado, pensando en el futuro de los chilenos", al trabajar para "devolver la confianza de los chilenos en sus Fuerzas Armadas".

Destacó que es la política más valorada de Chile, la primera presidenta electa y la más votada, y "representa bien la nueva generación de políticos de izquierdas, de tradición republicana y preocupados por la política de rostro humano".

Su prioridad, prosiguió, es la política social, la redistribución de la riqueza y ha llegado a la Presidencia con un programa "similar al del Gobierno de España, que coincide en los principios básicos de la ideología socialista".

"No es de extrañar que", pese a haber dos años de diferencia, con la llegada al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, "haya coincidido en la primera medida: un Gobierno paritario", a fin de garantizar "una democracia auténtica, sin discriminaciones ni privilegios".

DEMOCRACIA COMPLETA

"Ninguna democracia estará completa sin la plena participación de las mujeres", continuó. "A las mujeres nunca se nos ha regalado nada", y la presidenta de Chile ha hecho "visible el trabajo de muchas mujeres que han hecho posible que podamos representarlas".

De la Vega recordó que llegar a la Presidencia ha supuesto para Bachelet "grandes batallas y un esfuerzo personal extraordinario", y se mostró convencida de que en su mandato logrará poner en marcha sus compromisos, muchos de los cuales ya ha empezado a impulsar.

Concluyó que se siente "orgullosa de su triunfo", de que haya logrado el liderazgo de un país con el que el Gobierno español va a seguir impulsando relaciones de "confianza y lealtad".