La Diputación Permanente del Congreso de los Diputados debatió dos peticiones de esa comparecencia, una solicitada por el PP y otra del BNG con el respaldo del PNV, para que Fernández de la Vega explique la disposición del Gobierno para reformar la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg) y permitir que esos electores voten presencialmente en urna.

Ambos grupos argumentaron la urgencia de esa comparecencia en la necesidad de comenzar a trabajar para que esa reforma pueda aplicarse en los procesos electorales previstos para el próximo año.

Unos y otros subrayaron la necesidad de garantizar la confidencialidad del voto y la no suplantación de la identidad de los votantes. El portavoz del PNV, Emilio Olabarría, comentó con ironía "la buena salud de algunos muertos" incluidos en el Censo de Residentes Ausentes (CERA).

La petición de comparecencia fue respaldada por el portavoz de ERC, Joan Ridao, para quien la reforma más amplia prevista de la Loreg no debe ser excusa para no emprender modificaciones concretas que son "más urgentes".

La portavoz socialista, Meritxell Batet, anunció su voto a favor de esa comparecencia toda vez que la vicepresidenta mostró en el Parlamento su disposición a debatir sobre este asunto y aseguró también la voluntad de acometer reformas, entre ellas la del voto de los residentes ausentes.

Esa comparecencia, alertó Batet, debe servir únicamente para reafirmar esa voluntad política, ya que las reformas acordadas llevarán más tiempo y trabajo.

El PSOE, subrayó Batet, respaldó esa comparecencia a pesar de entender que no es urgente y que la petición responde "a un uso electoralista y a puro oportunismo político".