Santiago Martín explicó que aplicar las ratios de 25 alumnos por aula, como impone el citado decreto, significará que muchos alumnos no podrán continuar en los centros de la Fere, porque el Ministerio de Educación y Ciencia "está denegando sistemáticamente las solicitudes que hemos cursado para crear más unidades escolares".

La Fere ha realizado un estudio según el cual el próximo curso, cuando se imlanten los niveles de la reforma de Preescolar y el primer ciclo de Educación Primaria, "habrá más de 5.000 alumnos del último curso de Preescolar que no podrán continuar en nuestros centros y pasar a Primaria".

Según el estudio, la Fere dispone en la actualidad de 3.021 unidades escolares en el último curso de Preescolar y de 4.025 en primero de EGB, pero tendría que crear 969 y 846 más en las respectivas categorías para cumplir con las ratios exigidas.

Además, hay zonas en las que los centros pblicos están tan saturados que no podrán absorber a los alumnos que no puedan acoger los centros privados, por lo que se "verán vagando por las calles, a no ser que se organice un transporte escolar que los conduzca hasta centros alejados de donde viven", añadió Martín.

"La calidad de la enseñanza hay que pagarla", dijo Martín, "y lo que está claro es que no hay un duro, porque todas las peticiones cursadas durante el mes de enero para ampliar unidades escolares han sido denegadas".

Los representntes de la Fere estiman que si el MEC no aplica gradualmente la reforma perderán, a partir del próximo año y hasta el 2000, unos 275.000 alumnos en los niveles de Preescolar y Primaria y si no se les permite impartir la Enseñanza Secundaria Obligatoria la cifra de pérdidas ascenderá a 400.000.

Santiago Martín informó que estos asuntos están siendo negociados con el Secretario de Estado para la Educación, Alfredo Pérez Rubalcaba, "que nos ha prometido que los requisitos se van a flexibilizar, pero no h habido ningún pronunciamiento claro".

Por otro lado, los directivos de la Fere anunciaron la creación de una futura fundación canónica para salvar a los colegios católicos que están en dificultades, porque no tienen personal o quieren cambiar su orientación apostólica.

Finalmente, Celestino Hernando explicó que las patronales de la enseñanza privada -Educación y Gestión (EG) y la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE)- se reunirán dentro de tres meses, con un mapa sobre el número e centros que poseen, para establecer la representatividad en la negociación del IX convenio colectivo del sector.

Respecto a este asunto, Hernando criticó que empresas que nada tienen que ver con la enseñanza, como gasolineras o bingos, se acojan al convenio de la enseñanza por estar adscritas a la CECE.