Trincado señaló, en un encuentro con periodistas, que sólo la obligación de invertir impuesta por las autoridades energéticas obligaría a la compañía a ampliar su actual planta generadora en unos 500 megawatios de potencia instalada, por un alor de unos 30.000 millones de pesetas.

Indicó que Fenosa es la única empresa eléctrica privada que "se quedaría como está" sin la obligación de realizar compras de electricidad a la sociedad estatal Endesa, "porque dejaríamos de cobrar las compensaciones, pero tampoco tendríamos que aumentar los gastos, a lo sumo 100 ó 200 millones de pesetas".

Con estas manifestaciones, el responsable de Fenosa se alineó con las tesis de Iberdrola, la otra gran empresa eléctrica privada del país, cuyo presidene, Iñigo Oriol, condicionó una inversión de unos 150.000 millones de pesetas en el marco del nuevo PEN a que el Gobierno acabe con el "trato de privilegio" para la pública Endesa.

Además, las palabras de Trincado representan una limitación de los recursos con los que prevé contar el PEN para atender a las necesidades de inversión en nueva producción eléctrica para lo que queda de siglo, unos 950.000 millones de pesetas.

Teniendo en cuenta el anuncio de Iberdrola y de Fenosa, las inversiones en nuva generación de estas dos empresas privadas ascenderían a unos 180.000 millones de pesetas hasta el año 2000 y el resto sería responsabilidad de las empresas del grupo estatal Endesa, a excepción de los 15.000 millones de pesetas previstos por Hidrocantábrico en unos saltos de agua en Asturias.

Actualmente, el grupo Endesa está formado por la sociedad matriz Endesa y las filiales Electra de Viesgo, Fecsa, Eléctricas Reunidas de Zaragoza (ERZ), Empresa Nacional Hidroeléctrica Ribagorzana (Enher), la cnaria Unelco y la mallorquina Gesa, además de una posición muy destacada en Sevillana de Electricidad.

Respecto a la posibilidad de buscar alianzas con nuevos socios mediante intercambios de participación de capital, Trincado señaló que no existen proyectos de este tipo "porque no los necesitamos", ya que "tenemos el tamaño suficiente y el mejor equilibrio de producción eléctrica del sector".

El presidente de Unión Fenosa no entró en la crítica directa al Gobierno que hizo Iñigo Oriol, antes de iiciar la Junta General de Accionistas de Iberdrola, pero expresó su "desconcierto" por el beneplácito del Gobierno al intercambio de un 10 por cien entre Endesa y la alemana RWE Energie, cuando hace un par de años Fenosa lo intentó hacer con la misma empresa "y no nos dejaron".

EFECTOS DE LA SEQUIA

Por otra parte, responsables de Fenosa consultados por Servimedia señalaron que la sequía ha supuesto unas pérdidas para la compañía de unos 9.000 millones de pesetas y que en el conjunto del sector podrín rondar los 60.000 millones de pesetas.

El motivo de esta reducción en los ingresos previstos por ventas de electricidad con origen hidráulico está en el descenso de casi el 50 por cien registrado en la producción energética de este tipo en.el conjunto del sector y que en el caso de Fenosa se ha compensado mediante un incremento de la producción de origen térmico.

A pesar de calificar el año como "extraordinariamente seco", adelantó que la compañía prevé cerrar el ejercicio de 1992 con un incremnto de los resultados respecto a 1991 y que en los cuatro primeros meses del año Fenosa ha incrementado sus ventas un 17 por cien, el beneficio bruto ha subido un 18 y el "cash flow" es un 20 por cien respecto al mismo periodo del año pasado.

En 1991 Fenosa obtuvo unos beneficios netos de 17.224 millones de pesetas, un 28,1 por cien más que el ejercicio precedente, y sus ingresos superaron los 300.000 millones, mientras que los gastos financieros descendieron un 3 por cien.

La deuda de la compañí ascendía a finales de 1991 a 585.957 millones de pesetas, 64.853 millones menos que en 1990, lo que la convierte, según su presidente, en la única firma del sector que redujo su deuda durante el pasado año.