Arenas insistió en que lo lógico es que el PP siga ostentando la presidencia de la FEMP, puesto que ha sido el partido vencedor de las elecciones municipales del 13 de junio y animó al PSOE y a IU a pactar una candidatura consensuada.

Según los estatutos de la FEMP, el partido que ostenta la presidencia se queda también con la vicepresidencia segunda, mientras que el segundo partido en votos ostenta al primera vicepresidencia.

El esquema que propone el PP supone que Rita Barberá, la actual presidenta y alcaldesa popular de Valencia, siga ostentando ese cargo y que PSOE e IU se queden cada uno con una de las vicepresidencias.

El dirigente popular insistió en que una asamblea de confrontación significará que el bloque perdedor e quedará con una menor representación en los órganos de dirección.

Ofreció nuevamente diálogo al PSOE para la FEMP "no salga herida de muerte" de la Asamblea convocada para los días 25, 26 y 27 de noviembre, pero advirtió que debe ser el PP, que venció en las elecciones, el que ostente la presidencia.

En lo que se refiere a la lucha por los apoyos dentro de la Federación, los populares aseguran que tienen el voto de CiU, Coalición Canaria, el Partido Andalucista y el Partido Aragonés Regionalist.