En el prólogo del libro "2.001 días en Interior", del que es autor Barrionuevo y que fue presentado hoy en Madrid, González afirma del ex ministro de Interiorque "impresiona ver cómo se transparenta su personalidad de hombre bueno al frente de una durísima responsabilidad".

"Impresiona", agrega González, "el homenaje a las víctimas del terrorismo tantas veces reclamado por las familias que han sufrido esta lacra del tardofranquismo de la democracia. Impresiona su lealtad a la transición, entendida también en clave personal, cuando revela su respeto por Rosón y sus antecesores".

El secretario general del PSOE afirma que el libro se debería llamar "PepeBarrionuevo: Pasión y sufrimiento de una tarea de Gobierno", y reconoce que es "probable que el ministro de Interior sea el puesto más difícil en cualquier equipo de Gobierno".

Por otro lado, González recuerda el asalto al despacho de Barrionuevo en las últimas semanas y afirma que "sólo algo es seguro: no son vulgares ladrones. También hay algo casi seguro: tardará en saberse, si se sabe, la verdadera intención de esta operación: una más de una larga historia".

Añade que "siento afecto por él, ms alla de sus aciertos como responsable político. También siento que, como en otros casos, él no es la pieza a batir en esta cacería en la que algunos han convertido la política".

"Cuando algunos (de la jauría o de los que la dirigen) insisten en que quieren verme como imputado" en el caso GAL "o al menos como testigo, quiero decir a los lectores de este libro, y también a Pepe Barrionuevo o Rafael Vera, que estoy dispuesto", asegura el secretario general del PSOE.