Lo dijo durante su intervención en el acto 'La España que funciona' celebrado en Málaga junto al alcalde de la ciudad, Paco de la Torre, y al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, entre otros dirigentes del PP, ya inmersos en precampaña para las elecciones europeas del 9 de junio.

"Somos el único partido de Estado", proclamó Feijóo, porque en todas las elecciones a las que se han presentado, siete desde que él fue elegido líder del PP, "hemos defendido la Constitución y las instituciones, no hemos enfrentado a los españoles, hemos aguantado de todo", incluso a quienes decían que "habíamos perdido las elecciones después de haberlas ganado", y estar en la oposición pese a ser el grupo con más escaños en el Congreso y tener mayoría absoluta en el Senado.

Por ello, desde ese poder territorial que empezó a agrandar Juanma Moreno al ganar en Andalucía, los dirigentes del PP "estamos intentando levantar España" sobre la premisa de que hoy el Gobierno de España "reside en los ayuntamientos y en las comunidades autónomas".

Más allá de las diferencias de cada cual, Feijóo enfatizó que en el PP "todos estamos a una y esa una es España" y por ello se sigue comprometiendo con los problemas de los españoles sin "excusarnos como el PSOE por haber incumplido" sus compromisos "y vamos a seguir haciendo nación y no a subastar aquello en lo que creemos: l aigualdad y el interés de todos los vecinos de España".

Destacó que en el PP pueden "mirar a la cara a la gente que confío en nosotros" y mencionando expresamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió "menos soberbia, menos división, menos insulto, más colaboración y más humildad". Además, tienen "la conciencia tranquila porque ejercemos el gobierno con responsabilidad" y sin decirle a la gente "conmigo o contra mí".

Las elecciones europeas, prosiguió, son "la oportunidad para pronunciarnos sobre todo lo que llevamos años padeciendo, lo contrario a lo comprometido, a lo votado, a la igualdad, a la libertad, a la dignidad, a lo que es y lo que tiene que ser España", un país de 48 millones de ciudadanos "libres e iguales, iguales y libres".

Llamó por ello a votar contra "las mentiras, los privilegios, las cesiones y la decadencia", contra quienes han tratado "de arrinconar a todos los que llevan la contraria al Gobierno", quienes tachan de "enemigo a quien piensa diferente" y pretenden "controlar" las instituciones y "limitar la capacidad de la justicia, la prensa y la oposición para que no ejerzamos nuestra responsabilidad".

Hasta el punto, denunció, de que se está "buscando la censura en medios de comunicación porque solo se puede conocer la versión oficial", todo ello para "huir de los compromisos, las responsabilidades y las explicaciones pendientes que tiene el Gobierno". Sin embargo, de las urnas "no podrán huir" y en ellas "España va a dar su respuesta".

Feijóo acusó al Gobierno de querer "retroceder cuarenta años atrás después de todo lo que hemos sufrido durante todo ese tiempo" y preguntó si acaso el PSOE "se ha convertido en el partido oficialista de España".

Proclamó ante todo ello que en las elecciones europeas "cada español agraviado puede dar su parecer sobre los incumplimientos, las prebendas, las concesiones en contra de la igualdad, la cesión al independentismo que financia el resto de España", y "cada español desatendido puede reclamar el trato que merece". Ademñas, los jóvenes podrán decir si, como Sánchez, creen que "la economía va como un cohete para comprar una vivienda", y las familias si creen que sus cuentas van "como una moto" a pesar de no llegar a fin de mes.

Alertó de que "solo hay una forma de que el Gobierno nos escuche", que es "derrotándole", y eso solo puede pasar votando al PP. "Si concentramos, ganaremos", sintetizó, condensando en dos sus principales compromisos en estas elecciones: impulsar un pacto europeo del agua y que la sequía sea "determinante" para el reparto de fondos europeos.

"Este país tiene remedio, es el Gobierno el que no lo tiene", insistió, poniendo como ejemplo de gestión a Juanma Moreno, del que dijo que "eso es un presidente y lo demás es resistencia después de haber perdido". Como en las municipales y en las generales, concluyó, "si nos volvemos a volcar", el Gobierno se llevará "un enorme revolcón".