Así lo aseguró ante los medios de comunicación tras visitar las instalaciones de Petronor en Muskiz (Vizcaya) y mantener un encuentro con afiliados en la sede del partido en Getxo, donde fue preguntado por su relación actual con Urkullu y hasta qué punto su trato puede ser un puente para mejorar las relaciones entre el PP y el PNV.

En primera instancia, Feijóo rechazó contestar porque dijo que el “objeto” de su visita al País Vasco es la “invitación” del Círculo de Empresarios Vascos con cuyos miembros se reunió en el Club Marítimo de Adra. No obstante, optó por profundizar en la cuestión y recordó que mantiene una relación con Urkullu desde 2012, cuando fue elegido lehendakari.

“Mi relación personal siempre ha sido buena, correcta y se ha basado en una confianza que se ha venido desarrollando desde que le lehendakari asumió su responsabilidad en el año 2012”, afirmó Feijóo, acompañado del líder del PP vasco, Carlos Iturgaiz. “Entiendo que es fácil entenderse con el lehendakari Urkullu. Nuestros antecedentes como presidentes de comunidades autónomas avalan una relación de confianza y proximidad”, añadió.

Feijóo se encuentra en el País Vasco con motivo de “su gira por las comunidades históricas” que arranca hoy en Vizcaya, que continuará este viernes con un viaje a Cataluña y que concluirá este sábado con una visita a Galicia.

Con estos viajes, busca exponer su plan económico a los principales organizaciones empresariales y "escuchar de primera mano la situación que atraviesa cada comunidad autónoma, y así poder seguir trabajando en un proyecto nacional y de alternativa al Gobierno de Pedro Sánchez”.

POLÍTICAS ECONÓMICAS DE URKULLU

Sobre la política económica llevada a cabo por el Gobierno vasco, opinó que “la situación industrial” de la comunidad ya “no es la que durante un tiempo” y que el “triángulo” económico entre Madrid, el País Vasco y Cataluña “se está decantando” para la capital.

En este sentido, Feijóo considera que “determinadas políticas fiscales deberían al menos ser reflexionadas y probablemente revisadas”, aunque reconoció que “es muy difícil para un presidente autonómico” ejecutar “una política industrial” con el Gobierno de Pedro Sánchez.

“Es muy difícil responsabilizar a un presidente de una comunidad autónoma del deterioro de la política industrial y económica en su ámbito territorial con una política errática y equivocada desde el punto de vista económico e industrial del Gobierno central. Vamos a ser justos y razonables”, matizó Feijóo.

Así las cosas, el líder de los populares incidió en que “es prácticamente imposible” que la política económica de una comunidad “vaya bien con el gobierno socialista” actual. Pero, a pesar de estas circunstancias, advirtió a Urkullu de que el PP ha “estudiado y observado” la economía vasca y cree que el Gobierno vasco "deben hacer un esfuerzo para mantener el peso de la industria" en el PIB autonómico, y "una reflexión de la alta fiscalidad que se paga en el País Vasco en relación con otras comunidades autónomas”.

Feijóo dijo que ya “habrá tiempo” para que él y Urkullu celebren una jornada de trabajo. “Siempre será una oportunidad para seguir profundizando en nuestras relaciones y seguir manteniendo un nivel de confianza como el que hemos mantenido en los últimos años”, concluyó.