A juicio de la FELGT, "el PP pretende por todos los medios dilatar al máximo el trámite parlamentario del proyecto de ley de matrimonio homosexual con el fin de continuar su ofensiva parlamentaria junto a grupos de extrema derecha sin ninguna base social".

Para Beatriz Gimeno, presidenta de FELGT, "la actitud del PP muestra un viraje a la derecha sin retorno que no vamos a olvidar jamás, camino en el que se ha encontrado con UDC", la formación que, junto a Convergencia, conforma CiU.

Gimeno también lamentó que "un sector del PNV proponga que nuestras uniones no se llamen matrimonio" y advirtió que "no vamos a aceptar que nuestras relaciones tengan un nombre diferente a las heterosexuales, eso es 'apartheid' jurídico, y esperamos que la mayoría de los diputados de este grupo se sumen al amplio consenso parlamentario existente en torno a la necesidad de igual denominación para iguales derechos".

Sobre las 500 personas que se manifestaron hoy ante el Congreso en contra de estas uniones y convocadas por la plataforma ciudadana HazteOir, el Foro Social de la Familia y el Instituto de Política Familiar, la FELGT aseguró que esa "escasa" participación "es una clara muestra de que detrás de estas organizaciones no hay base social alguna y que su repercusión asociativa es insignificante pese al importante apoyo económico que recibieron y reciben de los gobiernos del PP".

Según Beatriz Gimeno, "una organización como el Foro Social de la Familia no representa a nadie y menos a esos cuatro millones de familias que dicen están en su organización. Como el PP a base de falsear la realidad pretenden que acabemos creyéndola".