Fuentes sindicales consultadas por Servimedia señalaron que el acuerdo no ha sido suscrito por CCOO, lo que no impide la eficacia general del acuerdo, que contempla para el año que viene una subida imilar a la de la inflación más 0,5 puntos de ganancia en el poder adquisitivo.

El nuevo convenio de Fasa Renault afecta a un total de 14.800 trabajadores, de los que unos 800 abandonarán la compañía en 1993 debido al plan de bajas incentivadas y jubilaciones anticipadas.

El motivo por el que CCOO no ha suscrito el acuerdo es, según un portavoz de esta central, el establecimiento de la obligación de trabajar 12 sábados al año y el aumento de la flexibilidad laboral mediante la ampliación de horasextras y el compromiso de los sindicatos de aceptar los expedientes de regulación previstos por la dirección.

Para la empresa, el convenio "es equilibrado", y supone "un avance en la adecuación de la capacidad productiva a las exigencias del mercado, tanto en supuestos de subida como de bajada de la demanda".