En un análisis comparativo de 52 especialidades faRmacéuticas publicitarias realizado por esta publicación, se constata que dichos medicamentos pueden ser potencialmente nocivos para personas con patologías comunes, como hipertensión, problemas renals o diabetes. Asimismo, son desaconsejables para niños, ex alcohólicos y personas con intolerancia a la lactosa.

Los diabéticos, por ejemplo, no deben tomar medicamentos que contengan edulcorantes naturales como la sacarosa, el azúcar común y la glucosa, así como cafeína.

En el caso de los medicamentos para las vías respiratorias, sólo 6 de los 26 analizados por "Ciudadano" pueden ser ingeridos por un diabético sin que tengan consecuencias para su salud. Si se es hipertenso, tanto los antiácidos eleccionados como los analgésicos y laxantes son desaconsejables, pudiéndose administrar sólo siete de estos productos.

Si se padecen problemas renales, no es recomendable tomar preparados con sales de sodio o calcio ni sacarina sódica. Por ello, ninguno de los antiácidos, laxantes o complejos vitamínicos analizados por esta revista es aconsejable, así como la mayoría de los productos para las vías respiratorias.

En cuanto a los niños, ciertos compuestos presentes en algunos de los medicamentos aalizados pueden suponer un riesgo para su salud, como el sorbitol o la cafeína. El primero de ellos, en altas dosis, puede producir la aparición de cuadros diarreicos, e incluso deshidratación.

La cafeína les puede producir excitabilidad, hiperactividad e insomnio. Por tanto, según "Ciudadno", son desaconsejables todos los analgésicos, así como 11 de los productos para las vías respiratorias.