El informe, fruto de las visitas anónimas realizadas a 200 farmacias de 20 ciudades españolas, refleja que sólo un 6 por ciento de los establecimientos analizados merecieron una valoración positiva por sus consejos sobre aspectos como la posología o las contraindicaciones del medicamento prescrito.

José María Múgica, portavoz de la OCU, dijoen rueda de prensa que es especialmente inaceptable el elevado número de casos en los que las farmacias españolas recomiendan antibióticos para los procesos gripales, cuando es un medicamento ineficaz para este tipo de enfermedad.

Respecto a los precios de los productos aconsejados, el estudio pone en evidencia una gran disparidad en función de las distintas ciudades analizadas.

En Valencia se visitaron dos farmacias que recetaron para los mismos síntomas medicinas cuyo precio osciló desde las 32 pesetas de una oficina a las 3.020 para otras. Málaga y Santa Cruz de Tenerife son las dos localidades cuyos farmaceúticos prescriben innecesariamente los medicamentos más caros.

"PRODUCTOS MILAGRO"

Otro dato que llama la atención del estudio es la falta de un rechazo categórico por parte de los farmaceúticos a los denominados "productos milagro".

Por ejemplo, cuando el encuestador anónimo pidió al dependiente unas famosas plantillas adelgazantes anunciadas en televisión, cuya eficacia ha sidocuestionada por la mayoría de expertos, sólo un 18 por ciento de las farmacias visitadas dijo que no las vendía y además las desaconsejó encarecidamente. En cambio, un 11 por ciento las recomendó sin ningún rubor.

En las conclusiones del informe también se alerta sobre las dificultades encontradas a la hora de identificar al profesional farmaceútico de la oficina y distinguirlo de los mancebos (auxiliares).

Sólo en 97 farmacias (48,5 por ciento) las respuestas de la persona que atendió garantizabn que se trataba realmente de un farmacéutico.

José María Múgica afirmó que los resultados de la encuesta son "desalentadores" y han sido trasladados al Consejo General de Farmacéuticos para que tome cartas en el asunto.

Para la OCU, el asesoramiento de las farmacias a sus clientes "debe mejorar de manera significativa", sobre todo al tratarse de un país como España en el que los ciudadanos recurren asiduamente y en un alto porcentaje a la automedicación.