Los farmacéuticos se niegan a cobrar con un mes de retraso el dinero de los medicamentos expedidos a pacientes de la Seguridad Social. Esto sólo sucede en Andalucía, porque en el resto del país se cobra puntualmente, según dijeron hoy sus representantes.

El retraso supone que los farmacéuticos pagan cada año, por culpa de la Administración, intereses cercanos a los 600 millones de pesetas.

Alfonso Pére, presidente de los farmacéuticos andaluces, aseguró que el colectivo se ha convertido en "banquero del SAS" y advirtió que no están dispuestos a asumir ese papel. "Esto ya es insoportable para nuestra economía. Esto puede afectar al deterioro de la asistencia farmacéutica y al de nuestra propia estructura", subrayó, "porque en algunos casos también serán insorportables las pérdidas económicas que estamos teniendo y habrá que tomar medidas incluso de aspecto laboral".

En la actualidad la deuda del SAScon las farmacias asciende a 11.500 millones de pesetas, que debieron ser pagados el pasado día 20. El presidente de la asociación de empresas suministradoras de material sanitario, Víctor Covantes, cifró la deuda del SAS en más de 50.000 millones de pesetas y aseguró conformarse con que el SAS cumpla con el programa de pagos a que se ha comprometido.

Por su parte, el gerente del SAS, Ignacio Moreno, rechazó las críticas al considerar que la Consejería de Salud cumple los plazos acordados con los farmcéuticos. Moreno se mostró sorprendido por las críticas del colectivo y el anuncio de nuevas movilizaciones.

El SAS cree que hay satisfacción en el sector por el nivel de pagos de la Junta de Andalucía. "No hay ningún ultimátum de proveedores, en absoluto, y no sólo no lo hay, sino que hay satisfacción por los acuerdos alcanzados y los pagos realizados", dijo. El SAS considera normal un retraso de 30 días en el pago de su deuda a los farmacéuticos.