En concreto, la FADSP asegura que este sistema de gestión hospitalaria ha demostrado que ofrece una menor cobertura asistencial, que se traduce en menos médicos, enfermeras, camas y quirófanos por habitante.

Todo ello, asevera en un comunicado, lleva a unas mayores listas de espera, a mayor número de quejas por parte de los usuarios y a más derivaciones hacia los centros tradicionales. Además, añade, suelen ir asociadas a "un corolario de numerosas irregularidades económicas" que ni siquiera las hace menos costosas.

"La actual situación de la fundación de Alcorcón no hace sino corroborar lo ya conocido: las fundaciones no mejoran la asistencia, no reducen el gasto, y se prestan a numerosas irregularidades contables. Es decir, se trata de un modelo obsoleto, por lo que sería urgente la reincorporación de la fundacion de Alcorcón a la red hospitalaria pública tradicional", subrayó al respecto el presidente de la FADSP, Marciano Sánchez-Bayle.