La publicidad sólo advierte de esta condición en una diminuta tipografía, por lo que, al matizar de forma desproporcionada el mensaje principal, supone un caso de publicidad engañosa, prohibida por la Ley General de Publicidad de 1988. Su artículo 4 consdera engañosa "la publicidad que de cualquier manera, incluida su presentación, induce o pueda inducir a error a sus destinatarios".

Asimismo, en el anuncio se oferta un ordenador por 599 euros y el usuario puede interpretar que, aplicando el citado descuento, el precio final puede ser de 499 euros. Pero una vez más la letra pequeña matiza extremadamente el mensaje principal e indica que los 599 euros ya incluyen el descuento. En resumen, el cliente que no contrate el servicio ADSL de Telefónica adquiirá el citado equipo por 699 euros.